#AppleEvent, ¿en qué se diferencian el iPhone X y el iPhone 8?
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Apple sabe cómo crear expectación y cómo celebrar a lo grande su décimo aniversario. Diez años han pasado desde que Steve Jobs presentó el iPhone. Un dispositivo que marcó un antes y un después en la compañía de la manzana, y realmente, en el resto del mundo.Ahora regresó con una gran innovación gracias al iPhone X. La pantalla sin marcos llega a la firma de Cupertino. Así como el panel OLED, el diseño de cristal, y otras tecnologías, como la carga inalámbrica, el escáner facial entre otros. No son todas sus sorpresas.
El iPhone X Edition se viste de cristal, tanto en su parte trasera como en el frontal. Eso Sí, fusionándose con unos marcos de aluminio, que lo cierto es que le sientan muy muy bien, sobre todo con ese acabado brillante. Vemos diferencias notables respecto al iPhone 7 y 7 Plus, sobre todo al primer iPhone.
Pese a que cuenta con la misma línea de construcción, lo cierto es que hay una diferencia palpable en la trasera, además del cristal claro: la doble cámara ahora se sitúa en posición vertical, con un flash LED entre medios de ambas.
Apple se deshace de los marcos anchos en esta edición especial, siguiendo la estela de Samsung con el Galaxy S8 y S8+, o LG con el LG G6 y el LG V30. En este caso, los marcos laterales desaparecen, el marco de la parte inferior también desaparece, y en el frontal, sólo se ve una franja donde están alojados los sensores, el face ID, el altavoz y la cámara.
Apple se pasa a la pantalla sin marcos, en este caso, con un panel OLED de 5.8 pulgadas y tecnología retina, esto conseguirá tener un mejor brillo en la pantalla y mejor claridad de imagen. Por otra parte, se mejora el procesador. Ahora añade un chip A11 Bionic de seis núcleos. Además, la forma de desbloquear el dispositivo cambia. Hay que decir adiós al Touch ID, para dar la bienvenida al Face ID, una forma de desbloqueo similar al reconocimiento facial.
Las cámaras, en esta ocasión también mejoran. La doble lente trasera incluye una resolución de 12 megapíxeles, con estabilizador óptico de imagen y flash LED de doble tonalidad. La apertura de ambas es de f/1.8 y f/2.4. Esta doble cámara nos permite realizar fotografías con el famoso efecto desenfoque, además del zoom 2x. Por otra parte, Apple añade distintos modos para jugar con la cámara y nuestro entorno, pudiendo oscurecerlo o añadir más luminosidad.
Apple también ha añadido mejoras en su sistema operativo para este dispositivo. La pantalla sin marcos tiene sus desventajas, el botón home desaparece. Aun así, Apple se las ha ingeniado para poder acceder al inicio y a la multitarea. Lo hace con una pequeña barra en la parte inferior, donde podremos realizar estas dos opciones. Apple ya ha anunciado los precios del iPhone X en España. Habrá dos versiones, una de 64 GB con un precio de 1.159 euros. Además de una versión de 256 GB por unos 1.330 euros.
Por su parte, el iPhone 8 no llega para revolucionar, sino como una actualización de lo visto en el iPhone 7. El iPhone 8 tiene acabados en un cristal resistente que le da forma y estilo. Se trata de un terminal ergonómico de 138,4 x 67,3 x 7,3 mm que tiene un peso de 158 gramos. Desde luego ni es el más fino ni el más ligero del mercado. Pero tampoco es la pretensión de Apple. Otro punto en el que tampoco se ha innovado es en la protección.
Apple asegura haber innovado en la pantalla de su iPhone 8. Desde luego sigue dando gusto a los usuarios que no quieren un móvil extremadamente grande gracias a su panel de 4,7 pulgadas. Es de tipo IPS, y cuenta con resolución Retina HD.
Pero lo realmente interesante es el resto de tecnologías que incluye esta edición del teléfono de Apple. A saber: cuenta con pantalla True Tone o tono real, que adecua el balance de blancos según la situación y el ambiente en el que se encuentra el usuario. Algo que mejora la calidad de imagen o su representación en cualquier escena.
Otro de los aspectos que destacan del iPhone 8 es su renovada cámara. Se trata de una pequeña evolución respecto al iPhone 7. Solo cuenta con un único sensor en la parte posterior de 12 megapíxeles. La novedad radica en su apertura de f/1.8, lo cual, y de momento sobre el papel, asegura más detalle y calidad en fotos con peores condiciones de luminosidad.
Respecto al vídeo el iPhone 8 no se queda atrás, aunque no da ningún paso adelante. Su cámara es capaz de capturar vídeo en calidad 4K a una velocidad de 60 cuadros por segundo. También cuenta con modo cámara lenta a una velocidad de 240 cuadros por segundo, y reduciendo la resolución a Full HD.
El iPhone 8 aterriza con el procesador A11 Bionic. Un chip de cuatro núcleos que aseguran que es un 70 por ciento más rápido que el chip A10 Fusion. Lo acompañan dos núcleos de rendimiento para dar soporte a las tareas más arduas que superan en un 20 por ciento la efectividad del anterior chip.
El iPhone 8 por fin cuenta con carga inalámbrica. Eso sí, a partir de la almohadilla especial AirPower, que saldrá en 2018 sin precio conocido aún. La carcasa de cristal de este modelo permite el uso de esta tecnología. Además, Apple quiere llevarla a hoteles, restaurantes y otros lugares para hacerla compatible.
El iPhone 8 se pondrá a la venta a partir del próximo día 22 de septiembre en dos modelos. Uno con 64 GB de capacidad de almacenamiento, y otro de 256 GB. Su precio va desde los 800 euros en el caso del modelo de 64 GB, hasta los 1.000 euros en el de 256 GB. Llega en tres colores: oro, plateado y gris.