Arranca la carrera por el 6 G con el proyecto Hexa-X
Aún la sociedad nos estamos acostumbrando a usar la tecnología 5 G, pero la evolución de esta es imparable y nos pasa por delante a todos.
Al menos, esa es la sensación que tenemos cuando escuchamos noticias ya de proyectos basados en el 6 G, en la siguiente generación, esta vez con un proyecto europeo, el Hexa-X del que te vamos a hablar en este artículo.
Recuperar el liderazgo
Estamos en un momento donde las grandes potencias del mundo, China y Estados Unidos especialmente están pugnando entre sí por el liderazgo de la tecnología. Con este paso, se pretende buscar un liderazgo tecnológico perdido por el continente europeo.
En función de esto, se ha creado este proyecto Hexa-X formando un consorcio con 25 empresas del Viejo Continente. Nokia y Ericsson son algunas de las más fuertes que lideran este proyecto.
Este proyecto se ha puesto en marcha gracias también a la financiación del Proyecto Horizonte 2020 promocionado por la propia Unión Europea, aunque no se esperan expectativas hasta el año 2030.
El objetivo de Hexa-X
Lo que se pretende en primer lugar es desarrollar una visión de los futuros sistemas 6 G además de poner en marcha formas de conexión entre los mundos humano, físico y digital.
Se trata de crear también las redes inalámbricas de sexta generación, para lo que se debe encontrar una buena integración con los avances de inteligencia artificial y machine learning, que serán muy importantes en el futuro.
Se pretenden buscar soluciones para una cobertura global además de conseguir buenas velocidades y reducir la huella medioambiental.
Esto se hará en 3 fases, una primera donde se definirán las tendencias, las brechas y los requisitos para los habilitadores tecnológicos. La segunda fase determinará la arquitectura del proyecto y durante la tercera tendrá lugar el desarrollo y la demostración de las versiones finales.
¿Qué supondrá el 6 G?
Siempre es difícil tratar de imaginar el futuro, pero puede que ese futuro de la ciencia ficción con robos inteligentes y demás comodidades no esté tan lejos. El 6 G va a suponer una conexión mucho más rica y compleja de las que tenemos actualmente.
Se podrán hasta crear “copias” del mundo físico en un entorno virtual. Esto, que son los llamados “gemelos digitales” puede predecir, aplicar y encontrar soluciones para el mundo físico, con todo lo que ello supondría, tanto a nivel positivo como negativo, las aplicaciones serían enormes.
En el puerto de Livorno, en Italia, Ericsson ya ha creado un gemelo digital. Recogen información en tiempo real acerca de todo lo que ocurre gracias a sensores, cámaras y vehículos y esto permite generar un sistema de control de operaciones inteligente que permiten una mejora, tanto en eficiencia como en un menor coste energético.
El 6 G llega para mejorar aún más esto, se pueden crear estos gemelos digitales para aplicarlo a todo tipo de situaciones e incluso a ciudades enteras, con la mejora que tendría eso.
Viéndolo así, cualquiera que consiga un liderazgo tecnológico dará un paso muy importante al hablar de la evolución de la humanidad.
Al menos, esa es la sensación que tenemos cuando escuchamos noticias ya de proyectos basados en el 6 G, en la siguiente generación, esta vez con un proyecto europeo, el Hexa-X del que te vamos a hablar en este artículo.
Recuperar el liderazgo
Estamos en un momento donde las grandes potencias del mundo, China y Estados Unidos especialmente están pugnando entre sí por el liderazgo de la tecnología. Con este paso, se pretende buscar un liderazgo tecnológico perdido por el continente europeo.
En función de esto, se ha creado este proyecto Hexa-X formando un consorcio con 25 empresas del Viejo Continente. Nokia y Ericsson son algunas de las más fuertes que lideran este proyecto.
Este proyecto se ha puesto en marcha gracias también a la financiación del Proyecto Horizonte 2020 promocionado por la propia Unión Europea, aunque no se esperan expectativas hasta el año 2030.
El objetivo de Hexa-X
Lo que se pretende en primer lugar es desarrollar una visión de los futuros sistemas 6 G además de poner en marcha formas de conexión entre los mundos humano, físico y digital.
Se trata de crear también las redes inalámbricas de sexta generación, para lo que se debe encontrar una buena integración con los avances de inteligencia artificial y machine learning, que serán muy importantes en el futuro.
Se pretenden buscar soluciones para una cobertura global además de conseguir buenas velocidades y reducir la huella medioambiental.
Esto se hará en 3 fases, una primera donde se definirán las tendencias, las brechas y los requisitos para los habilitadores tecnológicos. La segunda fase determinará la arquitectura del proyecto y durante la tercera tendrá lugar el desarrollo y la demostración de las versiones finales.
¿Qué supondrá el 6 G?
Siempre es difícil tratar de imaginar el futuro, pero puede que ese futuro de la ciencia ficción con robos inteligentes y demás comodidades no esté tan lejos. El 6 G va a suponer una conexión mucho más rica y compleja de las que tenemos actualmente.
Se podrán hasta crear “copias” del mundo físico en un entorno virtual. Esto, que son los llamados “gemelos digitales” puede predecir, aplicar y encontrar soluciones para el mundo físico, con todo lo que ello supondría, tanto a nivel positivo como negativo, las aplicaciones serían enormes.
En el puerto de Livorno, en Italia, Ericsson ya ha creado un gemelo digital. Recogen información en tiempo real acerca de todo lo que ocurre gracias a sensores, cámaras y vehículos y esto permite generar un sistema de control de operaciones inteligente que permiten una mejora, tanto en eficiencia como en un menor coste energético.
El 6 G llega para mejorar aún más esto, se pueden crear estos gemelos digitales para aplicarlo a todo tipo de situaciones e incluso a ciudades enteras, con la mejora que tendría eso.
Viéndolo así, cualquiera que consiga un liderazgo tecnológico dará un paso muy importante al hablar de la evolución de la humanidad.
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