Económico, gigante y versión mejorada, las claves del iPhone 2018 de Apple

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Apple
está desarrollando la nueva generación del iPhone, según filtraciones, la cual consistirá en tres modelos que tendrán algo muy importante en común: Touch ID desaparece por completo y es reemplazado por Face ID.

Los tres dispositivos contarán con un diseño similar al del iPhone X, con diferencias en tamaños y precios. La información se conoció gracias a Mark Gurman, fuente casi infalible de filtraciones en el ecosistema Apple.  

La nueva generación del iPhone tendrá tres modelos: uno de pantalla OLED 6,5 pulgadas, uno sucesor del iPhone X con sus mismas dimensiones, y un modelo más económico con pantalla LCD de 6,1". El diseño del iPhone hasta el 8 desaparecería, junto a Touch ID.

El iPhone OLED de 6,5", conocido con el nombre clave de D33, tendría una resolución de 1242x2688 píxeles, e incluiría las especificaciones técnicas más altas de la familia de smartphones, similares a las de la segunda generación del iPhone X de 5,8".

El modelo LCD sería el sucesor y reemplazo del iPhone 8 y 8 Plus. Los nuevos iPhones llegarían en el tercer trimestre del año, acompañados de la nueva versión de iOS.

La pantalla más grande debería atraer especialmente a los usuarios de negocios, permitiéndoles escribir correos electrónicos y administrar hojas de cálculo en una pantalla tan grande como una tableta pequeña. 

Al igual que el iPhone X, el modelo más grande incluirá un escáner facial que desbloqueará el dispositivo y permitirá pagos. Apple también está preparando una actualización para el iPhone X de tamaño regular que internamente se denomina D32. 

Además, Apple está considerando una opción de color dorado para la actualización del iPhone X y para el nuevo modelo más grande. La compañía intentó desarrollarlo para el actual X, pero abandonó la idea debido a problemas de producción. La opción dorada es especialmente atractiva para los consumidores en Asia y puede ayudar a impulsar las ventas en la región.

Al menos en algunas regiones, Apple está considerando ofrecer una opción de doble tarjeta SIM para el modelo más grande. Eso permitiría a las personas usar sus teléfonos en países con diferentes planes de operadores sin tener que cambiar tarjetas. 

Además, Apple lanzaría un modelo low cost con la misma pantalla de borde a borde que el iPhone X y con reconocimiento facial, en lugar de un sensor de huellas dactilares.

Para mantener bajos los costes, el teléfono más económico utilizará una tecnología de pantalla LCD similar al tipo empleado en el iPhone 8. De hecho, tendrá bordes de aluminio y un respaldo de vidrio como el iPhone 8, no el acero inoxidable más llamativo que se usa en el iPhone X.

Con este nuevo trío, Apple quiere atraer al creciente número de consumidores que anhelan los atributos multitarea de los llamados phablets y al mismo tiempo atender a aquellos que buscan una versión más asequible del iPhone X.
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