Elegir la compañía móvil es un tema que se debe estudiar cuidadosamente. (Foto: Pixabay)

Las claves para elegir una buena compañía móvil

Compartir en:
La proliferación de operadores de compañías móviles en los últimos años hace que sea realmente difícil para los consumidores decidirse por una para contratar servicios considerados en la actualidad como imprescindibles.
Los usuarios se vuelven locos a la hora de buscar un operador móvil que les garantice la mejor oferta del mercado que cubra toda y cada una de sus necesidades.

Ya sea porque se mudan y quieren contratar la fibra más el móvil, o el ADSL con un pack de televisión en la nueva vivienda, porque abren un nuevo negocio o porque simplemente les cumple la permanencia y quieren ver nuevas opciones.

No son pocas las situaciones en las que hay que enfrentarse a la dura tarea de buscar y comparar las compañías proveedoras para ver cómo ha sido la experiencia de otros usuarios, la mejor manera de saber si estas empresas funcionan bien o no. En algunos casos, por fortuna, las compañías te facilitan las opiniones de sus clientes. Aquí, por ejemplo, podrás leer las opiniones de Yoigo que tienen sus clientes.

Consejos para elegir la mejor compañía móvil

La diferencia de precio entre las diferentes teleoperadoras es enorme y puede llegar fácilmente a los 200 euros de diferencia al año. Aunque este factor es muy importante, es conveniente que antes de comparar unas tarifas con otras, se valore qué es lo que realmente se necesita, cuántos datos hacen falta para el móvil, si se habla mucho, si se necesitan llamadas ilimitadas…

Y es que en demasiadas ocasiones se contratan servicios que no se aprovechan y que suponen un importante incremento del total a pagar. Estos son los mejores consejos que hay que considerar antes de elegir la compañía de telefonía móvil definitiva.

1. Contratar la velocidad que realmente se necesita para la casa o el trabajo
El uso que se haga de internet es lo que realmente importa para saber qué velocidad se debe contratar. Por ejemplo, tener 600 MB de fibra está bien si se le va a sacar partido, pero si sólo se va a navegar por internet sin una intención específica, como trabajar, estudiar o ver películas online, es lo mismo que tener un Lamborghini solo para ir a por el pan.

Entre la fibra y el ADSL, las diferencias son claras. Con la primera, las pérdidas de datos se minimizan, es mucho más estable y rápida que el ADSL, y la velocidad que llega a los usuarios es la contratada, ni más ni menos. El único inconveniente es que no llega a toda España.

El ADSL, en cambio, ofrece cobertura en toda España y los inconvenientes empiezan con un límite de velocidad máxima que está en unos 30 MB, con pérdidas de velocidad que se incrementan a medida que aumenta la distancia entre el domicilio del usuario y la central. A partir del 1,5 kilómetro de distancia, la velocidad con el ADSL empieza a descender.

2. Contratar los GB de datos que se necesitan para el móvil
En cuanto a la cantidad de GB datos que se necesitan en el móvil, ocurre exactamente lo mismo que en el caso anterior, contratar de más es malgastar el dinero. En el móvil, la velocidad también cuenta, pero es mucho más relevante la cantidad de datos que se tienen para consumir. En este sentido, aunque no es lo mismo navegar en una red 3G o 4G, es más importante el tiempo que se pueda consumir y eso depende de los datos contratados.

La mayoría de teleoperadores, en la actualidad, permiten seguir usando datos, aunque se supere el máximo contratado, pero a condición de hacerlo a una velocidad tan baja que resultará exasperante, con lo que, con toda seguridad, el consumidor va a preferir contratar más datos. Es necesario, por tanto, asegurarse de lo que realmente se consume para no pasarse ni quedarse cortos.

En el dispositivo móvil se puede chequear cuál es esta cantidad y de qué forma se consumen.  Tan solo hay que entrar en ajustes y acceder al apartado de uso de datos para verificar esta información. Se sabrá incluso con qué aplicaciones se hace un mayor consumo.

En relación a la velocidad de los datos, actualmente la mayoría de operadores utilizan las redes 4G, aunque hay algunos que ya llegan al 5G.

3. Aprovechar los packs con líneas adicionales, televisión, fijo para pagar menos
La mayoría de los usuarios necesitan los dos puntos anteriores, internet en casa y una línea de teléfono, pero para el trabajo o las familias es posible que se necesiten líneas adicionales o que se quiera contratar los servicios de televisión.

Los operadores ofrecen distintos packs que pueden interesar si se vive en pareja, con la familia o por motivos laborales, pues contratar todos estos servicios juntos resulta más económico que si se hace por separado.

Estudiar detenidamente las necesidades de cada familia o negocio ayudará a elegir el mejor de los packs que las distintas compañías ponen al alcance de los consumidores y usuarios. Un comparador de ofertas puede resultar de gran utilidad, en internet hay muchos disponibles totalmente actualizados que son muy fáciles de localizar.

4. Buscar las opiniones de otros usuarios
Por último, recodar que las opiniones de los clientes son muy importantes, pues sin duda son el fiel reflejo de si el operador realmente ofrece un buen servicio y cumple con lo que se ha pactado en el contrato, si ofrece una buena cobertura y no se sufren continuas caídas en la transmisión de datos.
Compartir en: