La marcha atrás de Instagram para contentar a sus usuarios

Hay que echar la vista atrás, para darse cuenta del error. Hace poco, Instagram anunció que los vídeos que se suban a Instagram, serán convertidos a Reels sin que los usuarios puedan decidir nada al respecto. Hay condiciones que evitan que esto ocurra, pero no son habituales como, por ejemplo, que el vídeo tenga una duración superior a 15 minutos.

El movimiento de Instagram es clave. La red social tiene un nuevo competidor, TikTok y consideran que la forma de hacerle frente es orientándose al contenido de vídeos. Instagram, en un inicio, ya copió este concepto de vídeos cortos de TikTok, aunque ya no lo son tanto, y los denominó Reels. 

Pues bien, con la decisión de convertir la mayor parte de los vídeos en Reels de forma automática, saltó la gran polémica que, al parecer, ahora vienen a ponerle punto final y está causando un gran furor en las redes sociales.

Sin embargo, no ha sido sólo el clamor del público lo que ha hecho que Instagram de un paso atrás y deshaga estos cambios. Las propias analíticas de la compañía también demostraron lo impopular que era el nuevo diseño en términos prácticos.

A esto hay que sumarle que el feed en pantalla completa y que el porcentaje de contenido recomendado en los feeds de Instagram y Facebook se duplicaría el año que viene.

Pues bien, ha sido el jefe de Instagram, Adam Mosseri, quien ha anunciado ahora que la plataforma de medios sociales "dará un gran paso atrás y se reagrupará". Mosseri ha anunciado la marcha atrás en una entrevista y ha añadido: "Me alegro de que hayamos asumido un riesgo: si no estamos fallando de vez en cuando, no estamos pensando lo suficientemente grande o audazmente".