El misterioso cubo lunar que intriga a los astrónomos chinos
Dentro de algunos meses los astrónomos chinos podrán conocer que es el cubo misterioso que hay sobre la superficie de la Luna.
Fue detectado por el Yutu 2, un objeto totalmente atípico presente en la cara oculta del satélite al que los científicos bautizaron como "misterioso cobertizo".
Durante el mes de noviembre, cuando el vehículo lunar Yutu 2 hacía su recorrido por la superficie de la Luna y localizó este montículo extraño con forma cúbica que sobresale y resalta en el color negro del firmamento.
El Yutu 2
Yutu 2 es el nombre de un vehículo espacial que China envió en el mes de octubre de 2019 para que realizara una inspección por el lado oculto de la Luna, actividad que ya está próxima a cumplir tres años y le permitió identificar este nuevo elemento extraño en el satélite lunar.
Yutu 2 tiene como significado “conejo de jade” y se estima que tardará entre dos y tres meses para llegar al cubo identificado recientemente, que despertó la curiosidad de los científicos, quienes lo enviaron directamente hacia ese elemento.
La distancia a la que el equipo avistó el cubo equivale a unos 80 metros aproximadamente, justo en el horizonte lunar.
Este vehículo lunar posee dos paneles solares que le proporcionan la energía necesaria para funcionar, seis ruedas para su desplazamiento, diversas cámaras de exploración que se complementan muy bien con un radar.
Gracias a todos estos elementos el robot puede explorar el lado oculto de la Luna, que no se puede visualizar debido a que su rotación natural se frena como efecto de la gravedad terrestre.
La nave no tripulada en la que el vehículo arribó a la Luna tripulada es la Chang'e-4, para garantizar que se iniciara la exploración de esta zona del satélite y así mostrar lo que existe en su superficie.
No es un evento tan novedoso
Contrario a lo que se pueda pensar, este descubrimiento no es tan novedoso para los científicos chinos, ya que ellos vaticinaron que con el lanzamiento de este vehículo a la luna se registrarían descubrimientos importantes hasta tal punto que se podría encontrar datos o información desconocida.
El lado de la Luna que no se ve
La Luna es un satélite que naturalmente hace algunos movimientos oscilantes que junto a las fuerzas gravitatorias de la Tierra hacen que solo se pueda observar el 40 % del satélite, lo que significa que más de la mitad está oculto.
Esa cara oculta de la Luna representó un misterio interesante para la humanidad hasta el mes de octubre del año 1959, cuando la sonda Luna 3 de origen soviético logró fotografiarla.
Posteriormente, en el año 2018, China inició por primera vez la misión espacial de exploración de la superficie de la Luna. El objetivo de esto fue estudiar principalmente los recursos minerales que existen en la zona, así como las radiofrecuencias existentes, pero como era de esperar, se ha logrado también un hallazgo muy interesante para los astrónomos y científicos.
Fue detectado por el Yutu 2, un objeto totalmente atípico presente en la cara oculta del satélite al que los científicos bautizaron como "misterioso cobertizo".
Durante el mes de noviembre, cuando el vehículo lunar Yutu 2 hacía su recorrido por la superficie de la Luna y localizó este montículo extraño con forma cúbica que sobresale y resalta en el color negro del firmamento.
El Yutu 2
Yutu 2 es el nombre de un vehículo espacial que China envió en el mes de octubre de 2019 para que realizara una inspección por el lado oculto de la Luna, actividad que ya está próxima a cumplir tres años y le permitió identificar este nuevo elemento extraño en el satélite lunar.
Yutu 2 tiene como significado “conejo de jade” y se estima que tardará entre dos y tres meses para llegar al cubo identificado recientemente, que despertó la curiosidad de los científicos, quienes lo enviaron directamente hacia ese elemento.
La distancia a la que el equipo avistó el cubo equivale a unos 80 metros aproximadamente, justo en el horizonte lunar.
Este vehículo lunar posee dos paneles solares que le proporcionan la energía necesaria para funcionar, seis ruedas para su desplazamiento, diversas cámaras de exploración que se complementan muy bien con un radar.
Gracias a todos estos elementos el robot puede explorar el lado oculto de la Luna, que no se puede visualizar debido a que su rotación natural se frena como efecto de la gravedad terrestre.
La nave no tripulada en la que el vehículo arribó a la Luna tripulada es la Chang'e-4, para garantizar que se iniciara la exploración de esta zona del satélite y así mostrar lo que existe en su superficie.
No es un evento tan novedoso
Contrario a lo que se pueda pensar, este descubrimiento no es tan novedoso para los científicos chinos, ya que ellos vaticinaron que con el lanzamiento de este vehículo a la luna se registrarían descubrimientos importantes hasta tal punto que se podría encontrar datos o información desconocida.
El lado de la Luna que no se ve
La Luna es un satélite que naturalmente hace algunos movimientos oscilantes que junto a las fuerzas gravitatorias de la Tierra hacen que solo se pueda observar el 40 % del satélite, lo que significa que más de la mitad está oculto.
Esa cara oculta de la Luna representó un misterio interesante para la humanidad hasta el mes de octubre del año 1959, cuando la sonda Luna 3 de origen soviético logró fotografiarla.
Posteriormente, en el año 2018, China inició por primera vez la misión espacial de exploración de la superficie de la Luna. El objetivo de esto fue estudiar principalmente los recursos minerales que existen en la zona, así como las radiofrecuencias existentes, pero como era de esperar, se ha logrado también un hallazgo muy interesante para los astrónomos y científicos.
Compartir en: